En el segundo día de Quinario, durante la Exposición de su Divina Majestad en la Custodia, el promotor de Cultos y Espiritualidad, N.H. D. Francisco Garví Fernández ha dirigido la meditación de las siete palabras.

El Evangelio de ayer miércoles, en el que celebramos la Solemnidad de San Juan de Dios – Copatrón de Granada, el Evangelio nos presentaba la parábola del Buen Samaritano, a través de la que el Sacerdote nos ha invitado a meditar, a profundizar en la vida para descubrir los llamados de Dios.

Ha ido desgranando el mandato de amar al prójimo como a uno mismo, con la necesidad de huir del egocentrismo, y pidiendo reconocer a los prójimos malheridos que no sólo podríamos salvar, sino que se pueden convertir en nuestra mayor fuente de salvación. 

El Predicador del Quinario, ha finalizado la homilía de este segundo día de Quinario, subrayando que Dios actúa y se hace presente en las cosas cotidianas, de modo que no nos creamos los salvadores del mundo, sino para que también nos creamos necesitados de salvación a través de los hermanos.

Así vivió San Juan de Dios, ejemplo para nosotros de entrega, de amor, de servicio y de salvación para muchos. “Pidamos su intercesión.”

Fotografías: Carolina Fernández Herrera.