El Lunes Santo de 1993, 5 de abril, tiene lugar la primera salida procesional de la hermandad tras su revitalización. La imagen del Santo Crucifijo volvía a las calles granadinas cuarenta años después, sobre un calvario de lirios morados en el que figuraba un ramo de flores en recuerdo de su Secretario Antonio Salguero y Bas. El paso, diseñado por Dubé, se encontraba aún en fase de ebanistería, trabajo realizado por los hermanos Caballero. Las andas, acompañadas por una capilla musical, iban precedidas por sendas filas de nazarenos con mirada al frente y vestidos con túnicas negras de cola y cirio al cuadril. Abría el cortejo el muñidor de la hermandad. Desde esta primera salida, la hermandad impuso una impronta caracterizada por la seriedad de su cortejo.