Con gran alegría hemos culminado el Solemne Quinario en honor al Stmo. Cristo de San Agustín, en este camino cuaresmal en el que estamos renovando nuestra fe.
El Predicador, N.H. D. Pablo Olivieri, ha ido extrayendo el mensaje de la Palabra, dejando claro que Dios no es propiedad de nadie, de ninguna religión. Se ha detenido en la mujer samaritana que se rinde ante Jesús, el Hijo que viene sin prejuicios, con un lenguaje nuevo que nos conduce al Padre.
El Sacerdote ha subrayado la importancia del agua que da la vida, que no es otra que la que nos trae Jesús.
Ha destacado que el Padre nos quiere a todos, sin excepción, a pesar de nuestros pecados, y quiere que seamos verdaderos adoradores, en espíritu y en verdad, llevándonos a preguntarnos qué quiere Dios de nosotros.
Invitándonos a recordar qué experiencia con Jesús nos cambió la vida, nos ha pedido que descarguemos nuestra vida pobre y pecadora en Cristo, que crucificado en Cruz de plata protege a Granada.
Nos ha recordado que la Hermandad tiene una gran misión, que es beber siempre del agua viva que es Jesús, y contar nuestra propia experiencia, de modo que, seamos testimonios vivos y verdaderos, para todos aquellos que están sedientos de conocer a Jesús.
Nuestro agradecimiento y felicitación a N.H. D. Pablo Daniel Olivieri, por su predicación de este Solemne Quinario.
Al término de la Homilía, se ha procedido al juramento de reglas de los nuevos hermanos, e imposición de medallas.
Al finalizar la Misa, N.H. Mayor D. Luis Recuerda Martinez, ha dado la bienvenida a los nuevos hermanos y los ha invitado a participar de manera activa en la vida de nuestra Corporación.
Nuestra felicitación y bienvenida a todos nuestros nuevos hermanos.
